sexta-feira, 18 de abril de 2008

Ainda Dili (17)


Pintura João de Azevedo

Post com dedicatória

Quero

Quero que todos os dias do ano
Todos os dias da vida
De meia em meia hora
De 5 em 5 minutos
Me digas: Eu te amo.

Ouvindo-te dizer: Eu te amo,
Creio, no momento, que sou amado.
No momento anterior
E no seguinte,
Como sabê-lo?

Quero que me repitas até a exaustão
Que me amas que me amas que me amas.
Do contrário evapora-se a amação
Pois ao dizer: Eu te amo,
Desmentes
Apagas
Teu amor por mim.

Exijo de ti o perene comunicado.
Não exijo senão isto,
Isto sempre, isto cada vez mais.

Quero ser amado por e em tua palavra
Nem sei de outra maneira a não ser esta
De reconhecer o Dom amoroso,
A perfeita maneira de saber-se amado:
Amor na raiz da palavra
E na emissão,
Amor
Saltando da língua nacional,
Amor
Feito som
Vibração espacial.

No momento em que não me dizes:
Eu te amo,
Inexoravelmente sei
Que deixaste de amar-me,
Que nunca me amaste antes.

Se não disseres urgente repetido
Eu te amoamoamoamoamoamo,
Verdade fulminante que acabas de dentranhar,
Eu me precipito no caos,
Essa coleção de objetos de não-amor.



Carlos Drummond de Andrade

Sinais


Desenho Maturino Galvão

quinta-feira, 17 de abril de 2008

Terra

Somewildwish/30
O homem do cacilheiro não sabe que responder, se pela primeira vez lhe perguntam pela quantidade de energia e pelo real labor dos motores, que fazem com que aquela existência, longe de ser apenas deteriorável um dia, se sustenha para que tanto rume entre as margens.
Assemelha-se-lhe a questão, ao saber qual o volume de coração que deve soprar no desfiladeiro do amor, supondo que em derrocada deverá permanecer ágil.

Sinais


Desenho Maturino Galvão

FESTA MGM LISBOA - Quinta, 17 de Abril



21h30 – Documentário: “Guerra às Drogas”

22h00 – Conversa sobre as vantagens do auto-cultivo

23h00 – Música com:
DJ Unite
DJ Bob Dealer
The Positronics

Aparece! Vem apoiar a organização da Marcha!

Paul Veyne: Podemos viver sem mitos?

O Foucault de Paul Veyne surgiu. Vai fazer acontecimento. Tem o rigor de um trabalho minucioso de filosofia e de história. Conta episódios fundamentais da vida quotidiana do autor de "As palavras e das coisas". Paul Veyne é um dos maiores historiadores do século XX/XXI, e conheceu M. Foucault nos bancos da ENS da Rue d´Ulm.

"A humanidade pode passar sem a existência de mitos, tais como os da consciência e do progresso? Não sei, mas não se imagina que o consiga. Assim como não se consegue vê-la sem religiosidade ou ainda sem curiosidade filosófica. Apesar de todos os Nietzsche e Foucault do mundo, a humanidade gosta de invocar a Verdade e acredita ser verdadeiro aquilo em que crê. "Mitos" é uma palavra demasiado carregada de sentidos múltiplos, falemos porventura mais de enganos; o calvinismo foi o engano da economia da empresa capitalista."

"Essa palavra engano apareceu com grande insistência sob a caneta de Foucault, e tentamo-nos para lhe dar um destino, afirmando que constitui a primeira facilidade das estetizações: não é uma necessidade (cria-a, antes do mais), e não visa qualquer finalidade; as que pretendem continuar são pretextos: a salvação, a tranquilidade da alma, o nirvana, etc. A sua energia procede da sua liberdade, de uma pulsão do eu, da misteriosa "caixa negra" íntima, mais do que qualquer doutrina persuasiva: esta serve tão-somente de engano, de racionalização e de terreno de exercício".

In « Foucault », de Paul Veyne, Albin Michel Editeurs, Paris, Abril, 2008

FAR

quarta-feira, 16 de abril de 2008

Sinais


Desenho Maturino Galvão

De la fe en el mercado a la fe en el Estado

Incluso los neoliberales más radicales suplican ahora el intervencionismo del Estado en economía y mendigan las donaciones de los contribuyentes. Eso sí, cuando había beneficios, los consideraban diabólicos


Primer acto de la obra La sociedad del riesgo global: Chernóbil. Segundo acto: la amenaza de la catástrofe climática. Tercer acto: el 11-S. Y en el cuarto acto se abre el telón: los riesgos financieros globales. Entran en escena los neoliberales del núcleo duro, quienes ante el peligro se han convertido de repente desde la fe en el mercado a la fe en el Estado. Ahora rezan, mendigan y suplican para ganarse la misericordia de aquellas intervenciones del Estado y de las donaciones multimillonarias de los contribuyentes que, mientras brotaban los beneficios, consideraban obra del diablo. Qué exquisita sería esa comedia de los conversos que se interpreta hoy en la escena mundial si no tuviera el resabio amargo de la realidad. Porque no son los trabajadores, ni los socialdemócratas o los comunistas, ni los pobres o los beneficiarios de las ayudas sociales quienes reclaman la intervención del Estado para salvar a la economía de sí misma: son los jefes de bancos y los altos directivos de la economía mundial.
Para empezar, tenemos a John Lipsky, uno de los dirigentes del Fondo Monetario Internacional y reconocido fundamentalista del libre mercado, quien de pronto exhorta con una llamada alarmista a los gobiernos de los Estados miembros a hacer exactamente lo contrario de lo que ha predicado hasta ahora, esto es, evitar un derrumbe de la economía mundial con programas de gasto masivos. Como es sabido, el optimismo es inherente al mundo de los negocios. Cuando incluso él habla de que los políticos tendrían que "pensar lo impensable" y prepararse para ello, queda claro lo grave de la situación.
El fantasma de lo "impensable", que ahora es una amenaza en todas partes, debe por supuesto despertar el recuerdo de las crisis mundiales de los siglos pasados, y salvar a los bancos del abismo. Entra en escena Josef Ackermann, jefe del Deutsche Bank, quien confiesa que él tampoco cree ya en las fuerzas salvadoras del mercado. Al mismo tiempo, se retracta de su abjuración y afirma que no tiene dudas sobre la estabilidad del sistema financiero. Eso suena tranquilizador. ¿O no? Si el distinguido economista fuera sincero, tendría que admitir dos cosas: que la historia de esta crisis es una historia del fracaso del mercado, y que en todas partes gobierna el desconcierto, o más bien la brillante ignorancia.
El mercado ha fracasado porque los riesgos incalculables del crédito inmobiliario y de otros préstamos se ocultaron intencionadamente, con la esperanza de que su diversificación y ocultación acabaría reduciéndolos. Sin embargo, ahora se demuestra que esta estrategia de minimización se ha transformado en lo opuesto: en una estrategia de maximización y extensión de riesgos cuyo alcance es incalculable. De repente, el virus del riesgo se encuentra en todas partes, o por lo menos su expectativa. Como en un baño ácido, el miedo disuelve la confianza, lo cual potencia los riesgos y provoca, en una reacción en cadena, un autobloqueo del sistema financiero. Nadie tiene mejores certidumbres. Pero de pronto, ahora se sabe en todas partes que ya nada funciona sin el Estado.
¿En realidad qué significa riesgo? No hay que confundir riesgo con catástrofe. Riesgo significa la anticipación de la catástrofe. Los riesgos prefiguran una situación global, que (todavía) no se da. Mientras que cada catástrofe tiene lugar en un espacio, un tiempo y una sociedad determinados, la anticipación de la catástrofe no conoce ninguna delimitación de esta índole. Pero al mismo tiempo, puede convertirse en lo que desencadena la catástrofe, siempre en el caso de los riesgos financieros globales.
Es cierto que los riesgos y las crisis económicas son tan antiguos como los propios mercados. Y, por lo menos desde la crisis económica mundial de 1929, sabemos que los colapsos financieros pueden derrocar sistemas políticos, como la República de Weimar en Alemania. Pero lo que resulta más sorprendente es que las instituciones de Bretton-Woods fundadas después de la Segunda Guerra Mundial, que fueron pensadas como respuesta política a los riesgos económicos globales (y cuyo funcionamiento fue una de las claves para que se implantara el Estado del bienestar en Europa) hayan sido disueltas sistemáticamente desde los años 70 del siglo pasado y reemplazadas por sucesivas soluciones ad hoc. Desde entonces estamos confrontados con la situación paradójica de que los mercados están más liberalizados y globalizados que antes, pero las instituciones globales, que controlan su actuación, tienen que aceptar drásticas pérdidas de poder.
Como se ha demostrado con la "crisis asiática", además de la "crisis rusa" y la "crisis argentina", y ahora también con los primeros síntomas de la "crisis americana", los primeros afectados por las catástrofes financieras son las clases medias. Olas de bancarrotas y de desempleo han sacudido estas regiones. Los inversores occidentales y los comentaristas en general observan las "crisis financieras" solamente bajo la perspectiva de las posibles amenazas para los mercados financieros. Pero las crisis financieras globales no pueden "encasillarse" dentro del subsistema económico, como tampoco las crisis ecológicas globales, ya que tienden más bien a generar convulsiones sociales y a desencadenar riesgos o colapsos políticos. Una reacción en cadena de estas características durante la "crisis asiática" desestabilizó a Estados enteros, a la vez que provocó desbordamientos violentos contra minorías convertidas en cabezas de turco.
Y lo que era todavía impensable hace pocos años se perfila ahora como una posibilidad real: la ley de hierro de la globalización del libre mercado amenaza con desintegrarse, y su ideología con colapsarse. En todo el mundo, no sólo en Sudamérica sino también en el mundo árabe y cada vez más en Europa e incluso en Norteamérica los políticos dan pasos en contra de la globalización. Se ha redescubierto el proteccionismo. Algunos reclaman nuevas instituciones supranacionales para controlar los flujos financieros globales, mientras otros abogan por sistemas de seguros supranacionales o por una renovación de las instituciones y regímenes internacionales. La consecuencia es que la era de la ideología del libre mercado es un recuerdo marchito y que lo opuesto se ha hecho realidad: la politización de la economía global de libre mercado.
Existen sorprendentes paralelismos entre la catástrofe nuclear de Chernóbil, la crisis financiera asiática y la amenaza de colapso de la economía financiera. Frente a los riesgos globales, los métodos tradicionales de control y contención resultan ineficaces. Y a la vez, se pone de manifiesto el potencial destructivo en lo social y político de los riesgos que entraña el mercado global. Millones de desempleados y pobres no pueden ser compensados financieramente. Caen gobiernos y hay amenazas de guerra civil. Cuando los riesgos son percibidos, la cuestión de la responsabilidad adquiere relevancia pública.
Muchos problemas, como por ejemplo la regulación del mercado de divisas, así como el hacer frente a los riesgos ecológicos, no se pueden resolver sin una acción colectiva en la que participen muchos países y grupos. Ni la más liberal de todas las economías funciona sin coordenadas macroeconómicas.
Las élites económicas nacionales y globales (los dueños de los bancos, los ministros de finanzas, los directivos de las grandes empresas y las organizaciones económicas mundiales) no deberían sorprenderse de que la opinión pública reaccione con una mezcla de cólera, incomprensión y malicia. Pero el convencimiento certero de que, en una crisis, el Estado al final acabará salvándoles, permite a los bancos y a las empresas financieras hacer negocios en los tiempos de bonanza sin una excesiva conciencia de los riesgos.
No tiene que ver con la envidia social el recordar que los exitosos banqueros ganan al año importes millonarios de dos cifras, y los exitosos jefes de firmas de capital riesgo y de fondos especulativos incluso mucho más. En los tiempos que corren, los banqueros actúan como los abogados defensores del libre mercado. Si el castillo de naipes de la especulación amenaza con desmoronarse, los bancos centrales y los contribuyentes deben salvarlo. Al Estado sólo le queda hacer por el interés común lo que siempre le reprocharon quienes ahora lo reclaman: poner fin al fracaso del mercado mediante una regulación supranacional.
ULRICH BECK - EL PAÍS - Opinión - 15-04-2008

José Pinto de Sá

Saigão (5)


(Ho Chi Mhin City) Saigão. Vietnam.2008

Foto FFC

Os vinte e nove Sonetos de Amor de Étienne De La Boétie

Soneto X

Je vois bien, ma Dordogne, encor humble tu vas:

De te montrer Gascogne en France tu as honte.

Si du ruisseau de Sorgue on fait ores( maintenant) grand compte,

Si( cependant) a-t-il bien été quelquefois aussi bas.


Vois-tu le petit Loir, comme il hâte le pas?

Comme déjà parmil les plus grands il se compte?

Comme il marche hautain d´une course plus prompte?

Tout à côté du Mince( Mincio), et il ne s´en plaint pas?


Um seul olivier d´Arne ( Arno), enté au bord de Loire,

Le fait courir plus brave, et lui donne sa gloire.

Laisse, laisse-moi faire, et un jour, ma Dordogne,


Si je devine bien, on te connaitra mieux ;

Et Garonne, et le Rhône, et ces autres grands dieux

En auront quelque envie, et possible vergogne.


FAR

Mambo 41

Se ao menos o silencio fosse escorregadio, teria um propósito.
Sempre um se poderia tombar nele e deslizar sem horizonte fechado que apouque, nas avantajadas costas das palavras, nessas desrodas eficientes que permitem o transporte para o interior de alguém, uma vez que o destinatário não se comporte como em tempo de guerra uma estratégica fronteira que existe apinhada de enfartamentos, nem que seus pensamentos de primeira fila, queiram na vida ser a criança que louca se estreita atrás do tronco de árvore no quintal, para não ser a próxima a ter que estar cega, a contar até cem a cada minuto em que se desajeita no encontro com os demais, enquanto progride na audição de si mesma.
As palavras não são blindadas.
O silencio, sim.
Se nele não chove.

terça-feira, 15 de abril de 2008

Sinais


Desenho Maturino Galvão

Itália: PC fora do Parlamento e Berlusconi quer ser PR

Berlusconi, que quer ser acima de tudo P. da República, vai ter que provar e realizar as promessas que semeou nos últimos dias da campanha, sobretudo as de natureza fiscal. A Itália irá ser governada por uma coligação de centro-direita, onde a ala radical, Liga do Norte, ganhou pontos pelo peso eleitoral que averbou. A coligação vencedora, PDL, encaixa o novo partido de Berlu que consegiu 33 por cento dos votos dos 46 da vitória. A Liga e a União Democrata Cristã, de Cassini, obtiveram o restante. O P.Democrático, de Veltroni, obteve cerca de 39 por cento dos votos.

Com uma dívida pública monstruosa (104% do PIB), um desemprego camuflado e endémico nos principais centros populacionais e um forte e crescente super-endividamento das famílias, a Itália acordou de um pesadelo pela queda do governo arco-íris de Romano Prodi, que quis restaurar o equilibrio macroeconómico da economia transalpina. Ao contrário da política de recuperação social e económica da Esquerda, com uma panóplia de medidas caras ao investimento e ao incremento tecnológico indispensável, Berlusconi tirou partido das receitas orçamentais de duvidosa eficácia " vendidas " por Sarkozy e GWBush, como era óbvio, uma espécie de Robin dos Bosques ao contrário, tirar aos pobres para dar aos ricos.

Nesta entrevista com Luca Ricolfi, clicar aqui, o grande sociólogo da Universidade de Turim põe a tónica o mau funcionamento do Estado, na disparidade crescente entre o Norte e o Sul do país, no peso da Mafia e da Cosa Nostra no endividamento público. Chama a atenção para a fragilidade dos amortecedores sociais do Estado: fundo de desemprego minoritário e selectivo.Fraca assistência social
e um preço médio de fontes de energia muito acima da média europeia, o que torna vãos os esforços de modernização industrial.

Pourquoi l’Italie est-elle au dernier rang de l’UE?
Parce que l’énergie et les transports grèvent notre économie. En 1987, l’Italie a décidé de renoncer au nucléaire mais elle n’a pas développé d’autres sources d’énergie. L’électricité coûte en moyenne 20 % de plus que chez nos principaux voisins. L’autre grand problème est celui du mauvais fonctionnement de l’Etat, qui gaspille les fonds publics. Les amortisseurs sociaux sont en Italie nettement plus réduits qu’en France ou en Allemagne : il n’y a pas de véritables indemnités de chômage sauf pour les employés du secteur public ou des grandes entreprises, ni d’aides pour la pauvreté extrême, ni suffisamment de crèches ou de soutien pour les personnes âgées. La gauche de la gauche, comme les communistes de Rifondazione, ont eu, à cet égard, raison de demander une augmentation des dépenses sociales. Mais l’Etat dilapide ses ressources par ses dysfonctionnements structurels. Un exemple: si les vingt administrations régionales de la péninsule fonctionnaient toutes comme les deux ou trois qui marchent le mieux - la Lombardie ou certaines régions «rouges» comme l’Emilie-Romagne - le pays économiserait chaque année 90 milliards d’euros, trois fois le déficit public de l’an dernier et 6 points du PIB ! Des zones comme la Campanie, la Calabre et la Sicile, où sévissent les diverses mafias, dépensent 50 % de plus que les autres régions du Sud, à cause des travaux publics inutiles ou surévalués et à cause d’un nombre d’emplois publics trois ou quatre fois plus élevé qu’ailleurs.

Que vont changer ces élections ?Le candidat du Parti démocrate (centre gauche) Walter Veltroni a été le plus courageux en promettant de réduire de 15 milliards d’euros par an la dépense publique pendant cinq ans. Personne n’y a jamais réussi. A droite, l’ambition s’est limitée à 5 milliards d’euros d’économies par an et une promesse de «révolution culturelle» dans l’administration publique. On peut rester sceptique sur ces engagements. Les réformes sont d’autant plus difficiles à mener que les caisses sont vides et l’endettement public atteint 104 % du PIB. Il faudrait miser à fond sur les entreprises, leur redonner de l’oxygène, relancer la croissance. Mais en Italie, la gauche comme la droite doivent tenir compte du consensus social, avec l’idée bien ancrée dans l’opinion que l’argent que l’on retire à l’Etat est de l’argent que l’on retire aux pauvres ou aux familles. D’où le souhait exprimé par de nombreux éditorialistes avant le scrutin d’un match nul électoral qui imposerait la création d’une grande coalition pouvant mener à terme certaines réformes parmi les plus urgentes.

Les inégalités continuent-elles de se creuser ?La misère a incontestablement augmenté. 20 % des familles ont recours à l’endettement pour subsister alors qu’il y a quinze mois, elles n’étaient que 12 %. Cela s’explique par l’augmentation des remboursements des crédits immobiliers et par celle du prix des biens de première nécessité, mais aussi par la pression fiscale accrue. Celle-ci est l’œuvre du gouvernement sortant de Romano Prodi. En revanche, malgré une idée communément admise, le fossé entre le Nord et le Sud ne se creuse pas, même s’il reste énorme : le revenu par tête des régions les plus développées reste de 30 % à 40 % supérieur à celui des zones les plus déshéritées.


FAR

United Nations Volunteers

"This is the internet awareness-raising page of an independent essay writer. It targets historians and military personnel among others who have a clear European vocation in foreign policy and defence issues.
Also, the Eurocorps-Foreign Legion concept and the raising of a Single European Regiment is presented to the internet community as an essential evolution in the European defence identity for several reasons: firstly, as an essential conceptual response to the massacre of Srebrenica after the withdrawal of United Nations peace-keepers on 11th July 1995; and, secondly, as a vital and commensurate evolution in the defence field following the introduction of the Single European currency, the Euro, on the 1st January 1999. (...)"

Mario Zanatti

http://paginas.pavconhecimento.pt/pessoais/dw/Mario_Zanatti/INDEX2.HTM

segunda-feira, 14 de abril de 2008

Ainda Dili (16)


Pintura João de Azevedo

Sinais


Desenho Maturino Galvão

Terra

Somewildwish/29
foto:g.ludovice

Allan D. Bloom: Weber e Nietzsche

" Weber designa Nietzsche como o ponto de partida comum dos pensadores admiráveis do séc.XX. Indica-nos também qual é o único problema fundamental: a relação entre a razão, ou a ciência, e o bem. Quando fala da " felicidade " ou do " último homem", Nietzsche não quer dizer que o "último homem" seja infeliz, mas únicamente que essa felicidade é nauseabunda. Para se compreender acertadamente a situação em que nos encontramos, é preciso possuir a experiência de um desprezo profundo; ora a nossa capacidade de desprezo está a desaparecer. A ciência de Weber pressupõe esta experiência, que se pode classificar de subjectiva "
In Allan D. Bloom, A alma desarmada.Ensaio sobre o declínio da Cultura Geral. Edit. Julliard.Paris
FAR

domingo, 13 de abril de 2008

Terra

African Woman/15 (Angola 2006)
Foto:g.ludovice


"Nada nos protege melhor da estupidez do preconceito, do racismo, da xenofobia, do sectarismo religioso ou político e do nacionalismo excludente do que esta verdade que sempre surge na grande literatura: todos são essencialmente iguais. Nada nos ensina melhor do que os bons romances a ver nas diferenças étnicas e culturais a riqueza do legado humano e a estimá-las como manifestação da multifacetada criatividade humana."
Mario Vargas Llosa